Las Manifestaciones Gemelas El Báb, precursor de Bahá'u'lláh


La razón del ser del Báb fue preparar el camino para alguien más grande que Él, a quien se refería como «Aquel a Quien Dios hará manifiesto», «El Prometido de todos los tiempos», «El Señor de las Huestes». En las enseñanzas del Báb yacía la idea de que aquel gran personaje de quien Él representaba la Puerta, y a quien solo los puros de corazón reconocerían, vendría a abrir un nuevo ciclo de la historia humana.

Según la perspectiva de la historia que emana de los textos del Báb, Él mismo cerraba un ciclo profético y auguraba uno nuevo. El ciclo que se cerraba es un ciclo de más de seis mil años en el que diferentes Profetas y Mensajeros de Dios habían venido a la tierra para guiar a la humanidad progresivamente hacia niveles de civilización mayores. Esos personajes divinos, también habrían tenido como propósito preparar a la humanidad para un momento culminante a partir del cual la opresión y el sufrimiento humano en la tierra desaparecerían como consecuencia de la llegada de una gran figura histórica, el Prometido de los tiempos, y de aplicación de los principios divinos y de los enfoques y métodos de ciencia a la organización de la vida colectiva sobre el planeta. Ese ciclo profético, por tanto, se cerraba con el Báb y se abría uno nuevo —el ciclo del cumplimiento— iluminado por Aquel a quien Él venía a anunciar.

Mirzá Husayn Alí, Bahá’u’lláh —la Gloria de Dios—, cuyo Bicentenario se celebró hace dos años, sería quien en 1863 proclamara que Él era ese gran personaje que el Báb había anunciado.

A continuación, se presenta una selección de escritos y textos del Báb donde se habla de Bahá’u’lláh en diferentes términos.

De todos los tributos que he rendido a Aquel que vendrá después de Mí el más grande es éste: Mi confesión escrita de que ninguna palabra Mía puede describirlo en forma adecuada, ni tampoco puede hacer justicia a Su Causa referencia alguna a Él contenida en Mi Libro, el Bayán.
El Báb
Si Él apareciese en este mismo instante, Yo sería el primero en adorarlo y el primero en postrarme ante Él.
El Báb
El Báb, el Exaltado, es la Mañana de la Verdad, el esplendor de cuya luz brilla en todas las regiones. Él es asimismo, el Anunciador de la Más Grande Luz, el Luminar de Abhá (Bahá’u’lláh). La Bendita Belleza (Bahá’u’lláh) es el Prometido de los libros sagrados del pasado, la revelación de la Fuente de Luz que brilló sobre el Monte Sinaí, cuyo fuego brilló en medio de la Zarza Ardiente. Somos, todos y cada uno de nosotros, siervos ante Su umbral, y permanecemos de pie como humildes custodios ante Su puerta.
'Abdu'l-Bahá

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El bicentenario del Báb (1819 - 2019)


En octubre de 2019 el mundo entero conmemora el 200 aniversario desde que esta Luminaria se remontara sobre el horizonte del mundo. Las centenares de miles de localidades y comunidades en las cuales residen seguidores de Bahá'u'lláh, brillarán en conmemoración de Su Aparición.

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